Riccardo Orsolini, la joya del fútbol italiano

junio 25, 20207 minutos de lectura Jonay Antón

Es cierto que el nivel del Calcio ha bajado en los últimos años si lo comparamos con los finales de la década de los noventa o en los comienzos del nuevo siglo. Este motivo no lo tiene que pagar nuestro protagonista de hoy, Riccardo Orsolini. El monopolio de la Juventus y la caída en picado de históricos como el Inter, el AC Milan o el AS Roma, ha provocado que el campeonato italiano casi siempre tenga el mismo guion para el aficionado al fútbol internacional. Asimismo, el anuncio de prometedoras estrellas que cayeron en el olvido como Mario Balotelli, Andrea Belotti, o El Shaarawy, entre otros en los últimos tiempos, ha causado una pérdida de interés extrema en cuanto al seguimiento de la Serie A.

Pero esto tiene sus riesgos, como perderte que la Juventus esté dos años sin ganar la Coppa, que la Atalanta esté haciendo historia en Champions o que la Lazio pueda conseguir su tercer Scudetto para romper el dominio de los ‘Bianconeri’. Esto implica que no descubras a jugadores como Riccardo Orsolini, una de las sensaciones de esta temporada, que junto a Sandro Tonali (Brescia), debe ser uno de los jugadores que mereces conocer para seguirlo a partir de ahora.

La perla que dejó escapar la Juventus

Tres años rindiendo a gran nivel en el Ascoli, el equipo de su ciudad natal, fueron suficientes para que el jugador de 23 años llamase la atención de La Vecchia Signora. Aterrizó en Turín pero la calidad que había en aquel equipo en la zona ofensiva hizo que Massimiliano Allegri optará por ceder a Riccardo Orsolini a la Atalanta. Sin embargo, su paso por el club de Bérgamo fue inadvertido, especialmente porque tuvo pocas oportunidades, disputando tan solo ocho encuentros. Tanto fue así, que en el mercado invernal cambió de colores para recalar en su actual equipo, el Bolonia.

La llegada de Maurizio Sarri tampoco fue positiva para los intereses del extremo-delantero. Primero, por la amplitud de plantilla junto la llegada de hombres como Cristiano Ronaldo. Segundo, por la progresión de jugadores como Federico Bernardeschi, Douglas Costa o el hueco de reserva ocupado por el prometedor Moise Kean. Argumentos claves para que ‘Orso’ siguiera en las filas de los ‘Rossoblu’.

El bambino del Renato Dall´Ara

Con la confianza de Sinisa Mihajlovic, Riccardo Orsolini empezó la 18/19 en el banquillo pero siendo uno de los primeros revulsivos del equipo de la Región de la Emilia-Romaña. Con el 4-4-2, salía de suplente para hacer la función de delantero. A la posterior reconversión del sistema al 4-3-3 habitual, empezó a ser un fijo por la banda derecha, un puñal con el siete a la espalda.

Su primera temporada completa en el equipo del norte de Italia la acabó con 10 goles y 3 asistencias. En la presente campaña, está a punto de superar sus mejores marcas, ya que lleva 7 tantos y 4 pases de gol. Es tan vital su importancia, que Orsolini ha participado activamente en 19 goles en la Serie A (12 anotaciones y 7 centros), siendo el tercer jugador italiano con mejor marca tras Belotti (20) e Inmobile (35) desde marzo de 2019.

Un jugador que aparece en los momentos importantes. La mitad de sus goles llegan en el tramo final de los partidos, siendo el hombre más importante del Bolonia en cuánto a la relación numérica de cifras individuales con los puntos que obtiene el equipo.

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Agradecimiento eterno al ‘Bombardero de Borovo’

Su primera convocatoria con ‘La Nazionale’ fue el pasado mes de noviembre. Entró en la segunda parte en la victoria de Italia ante Armenia por 9-1 en la jornada 10 de la fase de grupos de clasificación para la Eurocopa. Su contribución fue un gol y una asistencia.

Orsolini lo tiene claro, si está donde está, es por su actual entrenador Mihajlovic. No debe caer en el olvido que el pasado verano el serbio (uno de los mejores lanzadores de falta de la historia del fútbol), fue diagnosticado con leucemia, lo que le hizo tener un largo periodo de rehabilitación, venciendo a la enfermedad cuatro meses después.

“Le debo mucho a Mihajlovic, y también es gracias a él que estoy aquí hoy. Está atravesando un importante período de rehabilitación. Me hubiera encantado recibir sus consejos y lo apoyo durante este tiempo. En el momento en que regrese a Bolonia quiero contarle todo lo que está sucediendo”

Uno de los culebrones del verano

Riccardo Orsolini será uno de los nombres de este mercado de fichajes. La Juventus, equipo al que pertenecía, plantea recomprarlo tras dejarlo escapar incomprensiblemente. Tiene planeado pagar 26 millones, pero la directiva del Bolonia ya ha aclarado que no van a dejar salir a su estrella del equipo por ese precio. 70 kilos o nada.

Otro de los equipos interesados es el Napoli. Un equipo que necesita savia nueva tras las probables salidas de José Callejón, Fernando Llorente o por las continuas lesionados de jugadores como el polaco Arkadiusz Milik. Aquí la directiva se muestra más flexible, pidiendo un precio entre 20-30 millones. El problema es que no tendría garantizado el puesto de titular y aunque la oferta le hace ilusión, él sabe que necesita continuidad si quiere estar presente en la Eurocopa de 2021.

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El estilo de juego de Orsolini

Riccardo Orsolini puede jugar tanto de delantero como de extremo. Eso sí, si hay que elegir la posición idónea, esa es la de jugador de banda a pierna cambiada. Es un futbolista muy completo, destacando su habilidad para el regate como hacia fuera como hacia adentro. Asimismo, consta de cambios de ritmo vertiginosos, superando a su adversario la mayoría de las veces con una aceleración endiablada. Tiene una facilidad asombrosa para conducir la pelota. También para elaborar técnicas de regate como la gambeta o la ruleta. Además, también recurre al recurso de la bicicleta aunque en menor medida.

Hay que tener en cuenta su faceta de atacante. Probablemente como único delantero no rendiría igual, pero con otro acompañante es un finalizador muy efectivo. Va bien en el remate de cabeza, gran capacidad para armar el tiro y por si fuera poco, buen lanzador en jugadas a balón parado.

Sabe leer muy bien las jugadas de ataque, en sus tres posiciones sabe estar en el momento indiciado. Define muy bien contra el portero. Quizás el único punto débil del jugador natural de Ascoli, es que podría tener una mejor capacidad de decisión, es decir, creerse el líder total del equipo en el campo pero todavía es joven y tiene tiempo para adoptar este rol.

De lo que no cabe duda es de que tiene todas las cualidades para ser una estrella en la próxima década, pudiendo ser uno de los líderes de un equipo grande y de una selección italiana que necesita resurgir cuanto antes. Solo su regularidad y constancia decidirá cual es su propio techo como futbolista.